Son estas experiencias vitales las que nutren los textos de Sabatis, un compositor experto en dibujar retratos costumbristas en sus canciones tan aparentemente rutinarios como devastadores como el descrito en ‘Bedrooms’, una preciosa oda pop al dormitorio como microuniverso en el que los malos recuerdos de la noche anterior parecen tomar vida propia; pero capaz también de dar con alegorías tan bonitas como la de ‘Dreamboat’, una canción fantasiosa y ufana sobre una relación «más Titanic que Loveboat» en la que su amante y él representan «un feliz naufragio».
Canciones cucas que se sirven de arreglos fabulosos, a menudo directamente espectaculares, entre el «easy-listening» de ‘Secrets of the Moon’, la balada crepuscular estilo años 50 de ‘1959’, el doo-wop de ‘Futile Games’ y el clasicismo decimonónico de ‘He Dances In the Shadows’ que no son tan clásicas como parece, pues siempre encuentran un elemento extraño o incluso fantasmagórico que las hace puramente actuales. No por nada ‘Fifteen Again’, que parece una canción de guateque sesentero versionada por Ariel Pink, es una de las mejores canciones del disco. Ojito que puede empalagar, pero si te dejas, ‘Futile Games in Space and Time’ puede ser todo un descubrimiento. Un disco que extrae tanto amor de las heridas solo puede ser bueno.
Evripidis and his Tragedies presentará ‘Futile Games in Space and Time’ el sábado 8 de octubre en el Teatro del Arte de Madrid.
Calificación: 7,2/10
Lo mejor: ‘Dreamboat’, ‘Fifteen Again’, ‘Bedrooms’, ‘Futile Games’
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