De entre los featurings que por aquí se pasean destacan por encima de todos ese ‘End of the World’ al que le sienta más que bien la presencia de Skrillex, ‘Freezing Out’ con una Peaches de lo más vacilona o ‘No Tony’, un número de hip hop en el que Phra de Crookers rapea en italiano sobre una base que haría las delicias del M83 de ‘Junk’.
También ha vuelto a reunirse con Boyz Noise en ‘Ruhe’ rememorando el espíritu de aquel proyecto llamado Handbraekes que hermanó a ambos en 2012 y 2014, y ha llamado a Siruismo para que le eche un cable en el tema titular. Pero en estos dos casos, al igual que ocurre en gran parte del minutaje de este disco, más que con canciones nos encontramos con retazos, ideas incompletas que podrían haber dado muchísimo más juego y que acaban cayendo en meras curiosidades. Abusando del loop como hace en esos pseudo-interludios titulados ‘Oiseaux’, ‘The One You Buy’ o ‘Ok Then’ (lo más french touch que aquí puede hallarse), Dupieux se muestra más desganado de la cuenta. Por motivos que desconocemos ha preferido poner sobre la mesa una serie de canciones que acaban siendo como un coitus interruptus (sobre todo, por lo abruptamente que terminan).
Aun con esas, lo que no tiene explicación alguna es porque no ha mantenido en el disco la versión primeriza de aquel ‘Hand In the Fire’ junto a Charli XCX que tan buenas críticas cosechó. Vale que la canción ya fue editada en el EP del mismo título a finales del pasado año, pero esta nueva vuelta de tuerca que aparece en ‘All Wet’ no le hace para nada justicia. ¿El hecho de pasar más tiempo detrás de las cámaras dirigiendo que dentro del estudio de grabación le está pasando factura creativa con los años?
Calificación: 5,5/10
Lo mejor: ‘End of the World’, ‘Freezing Out’, ‘No Tony’
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