Allí ha sufrido un pequeño percance que podría haber ido a engrosar nuestra lista de tragedias derivadas de fallos de vestuario, como aquella vez que el ciruelo de Lenny Kravitz se abrió paso de sus ceñidos pantalones o cuando a Laura Pausini se le abrió la bata, en aquel ya célebre «lo tengo como todas». A Brit le ocurrió que, mientras entonaba un medley de su versión de ‘I Love Rock ‘n Roll’ de Joan Jett y ‘Gimme More’, el top que vestía perdió el broche que lo cerraba al cuello, cayendo y poniendo en riesgo la privacidad de sus boobies
al más leve saltito.Tras infructuosos intentos del cuerpo de baile por arreglar la prenda, la autora de ‘…Baby One More Time’ tiró de experiencia y optó por lo contrario, ponerse varias capas de ropa de sus bailarines encima. Y así pudo acabar el número de manera totalmente airosa. ¡Bien hecho! No es el primer incidente que sufre la cantante en esta promoción: durante un show en Londres hubo de abortar una pirueta porque no se fiaba del bailarín nuevo.