«La verdad es que, vista la extraña deriva artística de Shakira, parece que el destino ha sido de lo más propicio para la artista de Barranquilla. Estamos en 2016 y los sonidos caribeños lo petan. Pues nadie mejor que ella para apropiarse del folclore de su país y su entorno para relanzarse. Tras el «vallenato desesperado» con el que ha arrasado este verano, Shaki se mueve como pez en el agua rapeando sobre el reggaeton de ‘Chantaje’. Solo por el hecho de contar con el co-protagonismo de Maluma, una de las nuevas estrellas del pop latino, y la propia Shakira, no necesitaría más que el pimpineleo que se traen en la canción para que esto sea un éxito. Por eso es digno de alabar que su producción tenga ciertos elementos bastante simpáticos y adictivos en sí mismos, como esas voces apitufadas (¿dicen «hola, mi bebé»?). Yo me lo bailo sin dudar, vamos». Raúl Guillén.
«El desprecio que despierta el reggaetón en sectores alternativos y pseudo alternativos es a veces injustificado. Otras veces no. El machismo que contienen las letras de muchas de las canciones de reggaetón que encontramos semana tras semana en la lista española lo hallamos en ‘Chantaje’ en una letra posesiva por parte de Maluma a la que por suerte Shakira responde con algo de libertad («No soy de ti ni nadie»). La obsesión con el sexo del género es también cansina. Que sí, que follar mola, pero a veces después de tres polvos, simplemente no puede ser. Esto es más de lo mismo. Y sin embargo, se supone que el objetivo de la canción pop* (Abba copyright) es ser recordada tras solo una escucha, y esta canción lo consigue con creces». Sebas E. Alonso
.«Shakira es experta en fusionar pop y elementos de la tradición musical latina, quizá no de la manera más elegante, pero sí de la más divertida: la batucada brasileña de ‘Lo hecho está hecho’ por vía de Pharrell Williams, el merengue electrónico de ‘Addicted to You’ y ‘Rabiosa’ y, por supuesto, la irresistible salsa de ‘Hips Don’t Lie’ son tres ejemplos. Pero ‘Chantaje’, que incluye al también colombiano Maluma en su papel de machito dominante (Shakira es «libre como el aire», por su parte), no es una buena canción; más bien, en su intento desesperado de fusionar reggaetón y tropical house se olvida de ofrecer una melodía interesante o, como mínimo, una letra digna de aparecer en nuestro top 100 de frases de Shakira. No, el «plot twist» del bebé no mola; más bien da vergüenza ajena». JB.