El jurado prometía mano dura con los famosos en las entrevistas promocionales del programa. De momento, no la hemos siquiera intuido. Todo lo contrario, se ha visto bastante manga ancha. Algunos famosos se conocen entre ellos, predomina el buen rollito entre todos, a algunos hasta ya los hemos visto con ganas de abandonar y se ve, en general y con contadas excepciones, muy poca tensión y muy poco nervio. La elaboración de los platos no es nada complicada. El pique entre Fernando Tejero y Loles León porque ella no le ha salvado cuando son amigos, promovido por los guionistas, ha sido de lo mejor del programa con todo lo de «fake» que ha tenido.
Que el jurado está metiendo poca caña a los famosos, que hay trato de favoritismo con respecto a los anónimos, se nota en que no se muestra la edad de los participantes. Así, donde conocíamos a Maribel como «Maribel, 59 años, ama de casa», en este formato se transforma simplemente en «María del Monte, cantante». Y si hay «ageism» en el mundo de la música, María del Monte; y en el mundo del cine y la actuación, Cayetana, Miguel Ángel Muñoz, que seguro que lo hay; los famosos han de saber que también lo hay en el mundo laboral de la calle. No, no es fácil labrarte una carrera o conseguir un nuevo trabajo a los 59 años.
La bella localidad madrileña de Chinchón ha intentado dejar una escena para la historia sin conseguirlo. El peor cocinero de la prueba de exteriores era lanzado «directo al pilón» en una fuente. Claro, no es lo mismo lanzar a un tipo en espléndida forma física como Fonsi Nieto que a María del Monte, que es lo que creíamos que iba a pasar pues su plato (unas tristes migas) también había sido un absoluto desastre.
María del Monte se ha salvado por los pelos de la primera eliminación. A sus 54 años no ha hecho una tarta en su vida y promete caer más pronto que tarde. Sin embargo, verla cocinar totalmente asfixiada, cuando no perder los estribos a la primera de cambio ha sido de lo más entretenido de momento. El programa, cuya obligación es manipular en pos del entretenimiento popular, debería propiciar pruebas que le permitan quedarse y a su vez ir condenando el rollazo que supone ver a El Cordobés y a su esposa (la ex modelo Virginia Troconis) apoyarse constantemente y hacerse arrumacos. Más que nada porque acabamos de ver lo mismo en ‘Masterchef 4’ con el protagonismo de las gemelas.
Cayetana Guillén-Cuervo (Cuervo, Cuervo…) ha sido la gran revelación junto a María del Monte y Fernando Tejero (Loles de momento se ha limitado al attentionwhorismo). Durante la primera prueba se ha cortado tantos dedos que en lugar de en casa viendo ‘Masterchef’ pensaba que estaba viendo una maratón nocturna del Festival de Sitges. Cuando no, su pelo parecía el del rodaje de una ‘Juana la Loca’. El equipo de ‘Quién quiere casarse con mi hijo’, ‘Granjero busca esposa’ y compañía haría maravillas con ella.
‘Masterchef’ duró ayer de 22 a 1 de la madrugada. Peor aún, el segundo episodio está programado entre 22.40 y 1.25 de la madrugada de mañana martes. No nos cansaremos de decir esto: ‘Masterchef’ mola pero no necesita durar 3 horazas para mostrar cómo Pepe y Jordi se pelean por tomar una copichuela de vino con Eva. Un dato: la prueba de eliminación era la realización de una tarta de queso en 60 minutos. En tiempo televisivo ha durado lo mismo: 60 minutos. Señores, por favor, editen.