Esta nueva canción, pese a cierto poso electrónico, no tiene mucho que ver, decantándose por las sonoridades acústicas en su retrato de un personaje marginal («pobre diablo azul (…) huiste de los dioses de la patria / Viniste del exilio como hojas rotas en el viento helado de la gran Europa») al que se anima a salir adelante («grita, lucha con las cenizas de tu rabia y tu valiente soledad / conquistarás la tierra») con la ayuda del propio artista, cuyos brazos se convierten en «ramas» por las que «escapar». Estribillo, aunque no lo parezca, hay.