Todos estas virtudes las resume ‘Fent amics’, el fabuloso primer single. Una joya de pop vivaracho, soleado y algo sixties, de estribillo sencillo y cautivador, en que destacan unos teclados locuelos que replican a Clara, mientras el resto de instrumentos suena como si también estuvieran invitado a la fiesta. Pero lo bueno del asunto es que ‘Fent amics’ no es el mejor tema del disco; el honor se lo disputan entre varios. Empezando por ‘Els afores’, en que una letra aparentemente banal sobre circular con el coche por las afueras, saltándose las normas de circulación entre carreteras desiertas, semáforos inútiles y descampados, se convierte en una vibrante gema salpicada de pequeños reproches envenenados. O ‘Sense voler’, una melodía memorable de pop sofisticado de los ochenta construida a base de juegos entre la línea de bajo, los leves sintetizadores y los coros. O ‘Fins un altre un dia’, cuyo enérgico estribillo remite a los mejores Belle & Sebastian. También cautiva la pereza estival de ‘Uns graus més’, la melancolía con poso soleado de ‘Els secrets’ o ‘Instruccions’, que es casi Bossa Nova rematada por un saxo soul…
Definitivamente, Viñals se ha convertido en una de las mejores compositoras de pop no de Cataluña, sino de toda España. Lo único que frena un poco mi entusiasmo por su disco es que se acaba demasiado pronto. Pero a buen entendedor, pocas canciones (y cortas, y preciosas) le bastan. Cuando ‘Els afores’ se termina, pues, simplemente hay que volver a darle al play.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Fent amics’, ‘Els afores’, ‘Uns graus més’, ‘Sense voler’
Te gustará si te gusta: El petit de cal Eril, Le Mans, Joan Miquel Oliver
Escúchalo: Spotify