Es fácil pensar que Glowie ha sido número uno en Islandia porque el país es pequeño -cuenta aproximadamente 300.000 habitantes-, pero por varias razones está claro que la artista está destinada a grandes cosas. Glowie, que se llama Sara Pétursdóttir, posee una voz melódica y comercial, cercana al ronroneo nasal de Britney Spears -en el estilo de Tinashe o Charli XCX- y sus canciones, producidas por StopWaitGo, deben su sonido al pop americano e inglés con influencias del hip-hop y el R&B. Para colmo, Glowie canta en inglés. A nadie debería extrañarle que ya se haya reunido con Universal.
Glowie cuenta a JENESAISPOP que ganó un concurso de talentos en Islandia a los 17 años, cuando fue descubierta por StopWaitGo, que produjo su primer single, el infeccioso ‘No More’, que suena como un hit perdido de los primeros 2000 que habría triunfado en voz de Lily Allen. No se perciben las mismas influencias en su single más reciente, ‘No Lie’, una irresistible fusión de pop y garage house tan inmediato como «cool», pero sí en ‘Party’, que parece de Jessie J (a quien Glowie ha teloneado) o la balada acústica ‘One Day’.
La cantante, que también es modelo, creció escuchando «góspel, R&B y hip-hop» y dice que entre los artistas que la inspiran se encuentran «Beyoncé, Lady Gaga, Frank Ocean, Chance the Rapper o Childish Gambino». Son los artistas, suponemos, que la motivarán a editar nuevo material a lo largo de este año y posiblemente su primer disco en 2018. «Oiréis de mí en 2017», confirma Glowie a este medio. «Quizás un EP en verano». Con estos singles, solo puede ser bueno.