Kate Bush es conocida por no actuar en directo y sus últimos conciertos, en 2014, se produjeron 30 años después de los primeros y únicamente en Reino Unido, donde reside. Mucho se ha hablado del miedo a volar de Bush y no parece probable que la cantante accediera a actuar en Estados Unidos por primera vez en su vida a estas alturas y menos para participar en un festival de estas características. ¿Qué le hace pensar a Geiger que Bush habría dicho que sí a Coachella? ¿Qué pinta Bush en Coachella, un festival mastodóntico, al aire libre y rematadamente «hipster», tanto para bien como para (muy) mal? ¿Existe algún fan de Kate Bush que prefiriera verla cantar en Coachella en lugar de en un recinto cerrado y de menores dimensiones?
No deja de ser reprobable, sin embargo, que Tollett subestime la capacidad de los asistentes de Coachella de «entender» a Kate Bush, como si Bush fuera Terry Riley o algo así en lugar de una de las artistas de pop más prestigiosas e influyentes de todos los tiempos.