En el estilo de la balada romántica americana de los setenta, aunque con el punto de melancolía y tono otoñal propio de The War on Drugs añadido por los sintetizadores y la voz de Adam Granduciel, ‘Strangest Thing’ nos habla, más que de un amor, de un estado de ánimo, el que se encuentra «entre la belleza y el dolor». En esa línea que separa ambas cosas hallamos a un Granduciel que ve un cielo «pintado de azul índigo» y que se siente «frío»: «reconozco cada cara, pero no tengo todo lo que necesito”, canta, antes de expresar repetidamente: «quiero salir corriendo”.
Melódicamente ‘Strangest Thing’ es una nueva obra maestra de The War on Drugs, aunque por supuesto es su desarrollo hacia el clímax el elemento de la canción que se ha de destacar: en este caso ‘Strangest Thing’ transcurre con la emoción a flor de piel hasta que explota en un escalofriante solo de guitarra en la segunda mitad, acompañado de los sintetizadores. Nos atrevemos incluso a decir que ‘Strangest Thing’ es una de las canciones comercialmente más viables que ha compuesto The War on Drugs hasta el momento, pero eso sería subestimar su verdadero poder, porque entre la belleza y el dolor, ‘Strangest Thing’ suena exactamente a la línea que separa ambas cosas.