Según la nota de prensa, «José Luis Rebollo (aka Madelman) ha construido un ritmo automático a partir de diferentes patrones de la clásica caja de ritmos Roland CR78, secuencias sintéticas y filigranas analógicas que parecen salidas de una manga pastelera. «El caso era dejar de lado la maraca, los bongos y el saxo reventón, para no pasarnos de decadentes ni reminiscentes. Así que nos ha quedado una canción con dos temperaturas que se hacen un favor la una a la otra. Porque ni el tecno es tan frío ni la voz va de sexy».
La cara B es una adaptación de Battiato, en concreto de ‘Chan-son Egocentrique’, mucho más bailable, rollo Eva Nasarre o Stereo Total. Indican: «Hay otras canciones de Battiato que nos gustan más, pero esta nos parecía más abordable, más fácil de hincarle el diente y jugar con ella. Tiene una melodía muy segura de sí, asertiva o idealista. Cuando la cantas parece que estás diciendo verdades universales válidas para el resto de los terráqueos». Además, no han querido usar la adaptación existente al castellano, sino combinar el inglés, el francés, el italiano y el alemán. «Desistimos de utilizar la adaptación oficial al castellano porque no acabábamos de entenderla. Con la letra original nos sentíamos más libres. Es como cuando viajas a un lugar donde nadie te conoce».