Maine ha explicado su posición al respecto en los “stories” de Instagram, apuntando que en ningún momento de su charla con OUT Magazine se habló de su relación con la comunidad “queer”, y mostrando su sorpresa ante un titular que le ha planteado como posible icono “queer” sin que él conociera esta intención por parte de la revista. Maine ha explicado que le interesa la identidad “queer” pero “sobre todo, la performance, y Porches para mí ha sido una plataforma con la que explorar quién soy”. Continúa: “Duele que se diga que me hago el “queer” para ganar dinero. ¿Tener relaciones exclusivamente con mujeres me hace no “queer”? ¿Significa esto que cuando me pinto las uñas o me pongo sombra de ojos me estoy apropiando de la cultura “queer”? Hago estas cosas porque me hacen sentir hermoso, y lo he hecho desde que era un niño por la misma razón”.
Por su parte, OUT Magazine ha actualizado su artículo añadiendo un prefacio en el que pide disculpas por el modo en que ha planteado la imagen de Porches ante sus lectores,“editorializando sus palabras y adjudicándole una identidad queer tanto en el texto como en el titular de la entrevista, sin dejar que él hable por sí mismo. El artículo ha insinuado de manera errónea que la identidad queer puede ser reducida a un “disfraz”, y esto ha dado lugar a un editorial sesgado, problemático y dañino que ha tergiversado la historia de la entrevista y ha hecho flaco favor al sujeto entrevistado y a nuestros lectores”.