Rosenvinge habla de su padre, a quien dedica ‘Romance de la plata’ (sobre la que nos ha hablado extensamente), como ejemplo de víctima del machismo aprendido contra el que el feminismo actual está luchando. “Él era víctima del espíritu de esa época, porque se pasaba la vida trabajando, sin darse cuenta que su presencia habría sido muchísimo mejor. Durante muchos años, supongo que en algún momento tuvo sentido que las mujeres nos dedicáramos a la reproducción y los hombres a la producción, pero en estos tiempos en que el mundo está superpoblado, es mejor que seamos pocos y mejores”.
La cantante añade: “mi padre era un hombre romántico al que le gustaban muchos las artes, pero se pasó la vida trabajando, con esto de equiparar la valía del hombre a su sueldo en vez de a lo que significa como persona y a cómo cuida de los suyos, que va mucho más allá de la cuestión económica”.
La autora de ‘La distancia adecuada’ ha concedido recientemente una recomendable entrevista con Píkara donde ha hablado de machismo y feminismo. Ha explicado que ‘El hombre rubio’ “está escrito desde un yo masculino indefinido y hablo de la cárcel de la masculinidad entendida como atributo social”. Continúa: “Es fundamental que los hombres se rebelen contra el machismo al tiempo que las mujeres se empoderan. Creo que éste es el siguiente paso. El macho se come al hombre que hay debajo. Tengo dos hijos varones y soy muy consciente de la presión que reciben en la adolescencia. Para los hombres maduros es difícil rebelarse contra algo que se supone que es un privilegio, no otra forma de esclavitud”.