Al parecer, tras la agresión, una amiga de la chica llamó a los Mossos d’Esquadra, que asistieron a la joven y la trasladaron al centro hospitalario. Tras ser dada de alta, la víctima prestó declaración e interpuso una denuncia a los Mossos que ya trabajan en identificar a los tres supuestos agresores.
La sala Razzmatazz ha lanzado un comunicado oficial en el que condenan lo sucedido y aseguran que prestan la máxima colaboración al cuerpo policial para esclarecer los hechos. Además, la sala barcelonesa recalca que está adherida a “No callem”, un protocolo impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona contra las agresiones sexuales y el acoso. Según La Vanguardia, la sala ha entregado todas las grabaciones de las cámaras de seguridad que controlan el acceso a la zona de backstage, aunque no hay grabaciones del interior del área restringida a los artistas y sus equipos por imperativo legal.