Sia además ha compartido en la entrevista una curiosa anécdota con Donald Trump, a quien conoció en 2015 durante un rodaje de Saturday Night Live (Trump entonces no era presidente de Estados Unidos). La australiana relata que Trump se topó con ella en el backstage y que entonces le pidió hacerse una foto con ella, ante lo que Sia “se quedó paralizada”. Buscando ser lo más educada posible, Sia declinó la invitación: “En realidad, ¿te importa si no nos la hacemos? Tengo muchos fans queers y de México, y no quiero que piensen que apoyo tus ideas”.
Sia recuerda que Trump no se tomó mal que ella rechazara hacerse una foto con él, ya que percibió que la cantante simplemente buscaba “proteger su marca” y fue respetuoso con su decisión. El magnate y futuro inquilino de la Casa Blanca contestó “no pasa nada, entonces no nos la hacemos” y la interacción entre ambos terminó sin mayor problema. Bueno, excepto lo que cuenta Sia que pasó después: “entonces me metí en mi vestidor y tuve una diarrea horrible”. Serían los nervios…