De ascendencia británica y filipina, la relativa popularidad de Ledger llegó de manera casi accidental. En septiembre de 2017 grabó una demo titulada ‘Coffee’ en el dormitorio de su amigo Oscar Lang (que también mantiene su propia carrera bajo el sobrenombre de pig) y la subió a un canal de Youtube con su nombre de usuario (sí, @beabadoobee). Ella creía que sólo interesaría a unos pocos amigos, pero en poco tiempo alcanzó 300.000 visualizaciones y en Spotify llegó a los 800.000 streamings. Una locura que atrajo a varios sellos importantes como Dirty Hit (The 1975, Wolf Alice, Pale Waves), que fue el que finalmente se llevó el gato al agua y publicó su primer EP, ‘Lice
’, meses atrás.Tras algún single suelto como ‘Susie May’, de nuevo producido por su inseparable pig, a principios de este mes de diciembre lanzaba ‘Patched Up’, un nuevo disco corto que ha contado con una grabación más profesional y una mayor profusión de arreglos para su bedroom pop, entre los que se cuentan algunas cuerdas, teclados y cajas de ritmo que dan mayor empaque a su sonido. Aunque, en cualquier caso, sigue basado en sus mimbres básicos, como muestra una de sus mayores cotas, el single ‘Dance With Me’. Esta canción sobre vencer la timidez en una fiesta para aproximarse a la persona que nos hace tilín, arranca con el esqueleto habitual en sus canciones, pero de manera tenue se van sumando capas de arpas, coros, metalófono y cuerdas, que elevan la propuesta instrumental de beabadoobee. Todo un encanto de canción que entronca tanto con coetáneos como Clairo o (Sandy) Alex G como con el espíritu de unos Kings of Convenience o unos Spring.