Todos los países que han presentado puestas en escena efectistas se han clasificado, como el espectáculo «subacuático» de Malta, de melodía similar a ‘Fuego’; el «dirty dancing» de Suiza, de melodía similar a ‘Fuego’; por supuesto el juego de paneles que multiplicaba a los Sergey por Rusia, un tanto Justin Timberlake en ‘Mirrors’; el soul de Suecia; el trío dance-vikingo de Noruega; o el número final de Azerbaiyán, con una de las mejores canciones de la noche y falsetes a lo Maroon 5 y Jimmy Sommerville. Este último ha hecho una exhibición de músculos de lo más gratuita al conocer su clasificación, asegurando followers antes de la gran final del sábado. La balada ‘Arcade’
de Holanda llega a la final, pero ojo, porque puede salir muy perjudicada por su enorme hype, arrastrado durante meses.Quizá la excepción de lo vistoso podría ser Croacia, pero su show de seres alados era completamente imposible: alguien no se ha echado nunca unas risas viendo ‘Barbarella’. También han sido eliminadas la canción irlandesa con reminiscencias de Meghan Trainor en la estética, y un poquito de Duran Duran y Van Morrison en lo sonoro; la horterada de los dibujillos en directo de Moldavia, visto hace demasiados años; el aburrimiento de balada austríaco o la balada de Letonia, mona pero muy poco televisiva.
En la gala se ha confirmado definitivamente la presencia de Madonna en la final, y se han presentado las candidaturas de Alemania, Reino Unido e Italia, ya disponibles en el Youtube oficial del festival, como la de España desde el martes.