Música

Rina Sawayama se precia de ser una «mala amiga» y versiona a Gaga

Hace apenas unas horas que Spotify ha comenzado a lanzar una tanda especial de canciones dentro de su serie «Spotify Singles», en las que artistas actuales hacen versiones, sin reglas. En este caso, se trata de una edición Orgullo 2020 en la que artistas que se identifican con la causa LGTB+ adaptan himnos de otros. Por ejemplo, el neocowboy enmascarado Orville Peck ha adaptado ‘Smalltown Boy’ de Bronski Beat, mientras que Rina Sawayama ha convertido ‘Dance In the Dark‘ de Lady Gaga en un nebuloso medio tiempo. Una curiosa versión –aunque esperable, porque es evidente que su sonido se nutre muchísimo de los primeros discos de Germanotta– que nos lleva a recordar su estupendo y aún fresco último disco, ‘SAWAYAMA‘. Por ejemplo, una de las canciones más bonitas y destacadas de ese segundo trabajo de la anglo-nipona, el retorcido medio tiempo ‘Bad Friend’.

Este tema es el broche perfecto para la primera parte del disco (la más espectacular, la verdad) por su aire reposado que, de forma tenue, va creciendo y se va convirtiendo gracias a sus azorados arreglos (tiene de todo: future pop, gospel, coros R&B…) casi casi en un banger. Y eso que comienza de manera delicada, casi como una balada a lo Mariah Carey, aproximándose después a lo bailable gracias a cierta épica… y al beat de la canción, claro. En ella, Rina se aproxima un tanto a la perspectiva pop de Tove Lo y, en cierto modo, a los encantadores aires retro de Carly Rae Jepsen. De hecho, la canción fue escrita y producidas en unas sesiones con Kyle Shearer, colaborador habitual de la canadiense. Y, para rizar aún más el rizo, la autora de ‘Call Me Maybe’ aparece mentada en la canción.

«Corrimos a travesando las brillantes luces de Tokio, nada que perder. / Verano del 2012, quemaba en mi mente. / Calientes, locas y borrachas, cinco en una habitación, / Cantando Carly con el corazón, sudor en nuestros ojos», canta Rina nada más empezar, aludiendo a una historia verídica. En ella, recuerda a una amiga con la que vivió todo eso y, pasado un tiempo, perdió contacto con ella, principalmente por su dejadez. Un buen día, como ha explicado, se encontró por accidente a esa mujer en Facebook, y contempló horrorizada que había sido madre. Arrepentida por haberse perdido algo tan importante, entonó el mea culpa escribiendo esta canción, diciendo que es/era tan buena irrumpiendo en fiestas (o montándolas) como «mala amiga».

‘Bad Friend’ ha sido objeto además de un vídeo fantástico hace pocas semanas. Haciendo un guiño a sus orígenes japoneses –con los que mantiene una relación de amor-odio en la que profundiza en este nuevo disco–, el clip dirigido por Ali Kurr –que ya había trabajado con Sawayama en sus clips previos ‘XS‘ y ‘STFU!‘– se inspira en el cine negro nipón de los años 40 y 50. Y es la propia Rina la que, caracterizada como un maduro y apocado hombre de negocios, se encuentra en una izayaka (una cantina, vaya) con un tipo pesadísimo, que le da la lata hasta que muestra a la «mala amiga» que lleva dentro… de la peor manera posible.

Lo mejor del mes:

Los comentarios de Disqus están cargando....
Share
Publicado por
Raúl Guillén