No son tiempos fáciles para una banda como Clap Your Hands Say Yeah. El proyecto ya en solitario de Alec Ounsworth llega a su sexto disco en mitad de una pandemia, sin la posibilidad de realizar giras con las que sustentarse y con el hype de sus inicios diluido: una cantidad ingente de los 30 medios de comunicación musicales que encumbraron su debut ya ni siquiera existe.
La crisis de identidad que pudiera implicar todo esto se ha visto agravada por la situación política de Estados Unidos. Obviamente ‘New Fragility’, que debe su título a David Foster Wallace, fue escrito antes de la elección de Joe Biden, y es abiertamente el álbum más social jamás realizado por Clap Your Hands Say Yeah, como se aprecia en pistas que se llaman cosas como ‘Hesitating Nation’, esta a su vez dando paso con sus coros sintetizados a ‘Thousand Oaks’, una composición sobre «una masacre americana en el sur de California» de la cual la gente se ha olvidado.
En este punto de la carrera de Clap Your Hands Say Yeah la gran pregunta es cuántas de las canciones que incluye un álbum suyo podremos recuperar dentro de 10 años. En ‘New Fragility’ destacan sobre todo 3, comenzando con la mencionada ‘Thousand Oaks’, que presenta una decidida base rítmica sobre una melodía que podían haber escrito The Killers pensando en Bruce Springsteen. «¿Y si consigo escalar esa montaña, qué me encontraré arriba?», se pregunta Alec desesperado frente a un futuro incierto, justo después de un punteo un tanto New Order.
‘Mirror Song’ es una canción también mágica a piano, a medio camino entre los Beatles y una melodía pop de Taylor Swift, enriquecida por los juegos de percusión. Y la gran sorpresa de esta era nos la da ‘CYHSY, 2005’, una canción retrospectiva sobre las penurias de realizar giras prácticamente con lo puesto, aderezada por un atractivo juego de cuerdas quizá consecuencia de lo que Alec ha estado escuchando a Tindersticks. Algo que se aprecia sobre todo en ‘Innocent Weight’, en la que el artista se pregunta una y otra vez qué ha hecho mal.
Ounsworth ha producido este disco junto a Will Johnson (Monsters of Folk), y bromea sobre su sonido sureño, quizá por la armónica de ‘Where They Perform Miracles’. Los Clap Your Hands Say Yeah que nos enamoraron con estructuras sorprendentes logran hacerte levantar de la silla al término de ‘Went Looking for Trouble’, si bien detrás de esta el álbum debería haberse dado por terminado en lugar de ofrecer una canción a piano grabada de mala manera como es ‘If I Were More Like Jesus’, una forma tonta de mostrar tu falta de calado ocasional como compositor. Sigue sin decaer el grupo, en cualquier caso: recordemos que el anterior ‘The Tourist’ en 2017 también sirvió como este para engrosar su considerable lista de «greatest hits».