Rigoberta Bandini suele conceder entrevistas pero es raro que le pregunten por sus planes discográficos: si habrá vídeo de ‘Ay mamá‘ o ya más bien piensa en otra cosa, y sobre todo cuándo publicará un álbum y si este contendrá algunas de las muchas canciones que ha venido publicando durante los últimos 2 años.
Sobre esto último le han preguntado en Conde Nast Traveler, cuya portada ocupa en compañía de Alizzz, con quien comparte el tema ‘Amanecer’ contenido en el excelente álbum de él, ‘Tiene que haber algo más‘. Dice Rigoberta sobre su propio álbum debut, “que existirá, pero de momento vamos a ir lanzando más singles, una colaboración muy guay con una chica que no puedo decir…”. Es decir, si hay más de un tema nuevo en camino, parece muy difícil que haya un disco en el mercado al menos hasta después del verano.
En cuanto a los planes de Alizzz, continuará este año trabajando como productor, al tiempo que seguirá con la promo de su álbum: “Ahora mismo sería una locura tirar la toalla en mi faceta de productor o de artista. No tengo más remedio que seguir con las dos, el destino me llama para ambas y las disfruto. Quiero y debo compaginarlas con toda la energía que pueda”.
En verdad, Conde Nast Traveler trata sobre viajes y es una curiosidad atender qué viajes narran los dos protagonistas de la portada. El escogido por Rigoberta Bandini es aquel previo a su embarazo y lanzamiento como artista: “El que hice con mi pareja –Esteban Navarro, del dúo cómico Vengamonjas y parte también del fenómeno Rigoberta– al poco de estar juntos. Fuimos al sur de Francia y nos pegamos una cena en La Diligence, en Montpellier, que marcó nuestra vida para siempre: me quedé embarazada al mes siguiente, Rigoberta comenzó a ser una realidad… fue todo muy fuerte, muy mágico. En esa cena se proyectó toda la abundancia que vendría después no solo profesional, también de amor, de familia”.
Alizzz, casi igual de emocional, recuerda la visita que hizo a Granada para conocer a su ídolo, Jota de Los Planetas, con quien también ha trabajado en su largo: “La verdad que ir a ver a Jota fue bastante mágico… Granada es para mí la ciudad más bonita de España, y Los Planetas, el grupo que me ha acompañado toda la vida. Además, Jota es un anfitrión que flipas, me enseñó la ciudad, me presentó a sus colegas… Un día bajamos en moto a ver al Capullo de Jerez desde su casa hasta el Sacromonte y me sentí como en la canción ‘Un buen día’. No se lo dije, pero fue un instante muy especial para mí aunque pueda parecer una tontería”.