Belén Aguilera ha dado un interesante paso artístico en su segundo álbum de estudio. ‘SUPERPOP’ no se llama así en vano: la artista ha escrito las canciones que lo conforman inspirándose en las divas que admira, como Beyoncé, Rihanna o la autora de ‘La Fuerza‘, con quien comparte apellido, y aunque no ha enterrado del todo su alias «the girl and the piano» (así se llamaba originalmente en Instagram), sí ha buscado crear un disco centrado en el pop comercialote de factura anglosajona, que muestre otra faceta de ella además de la clásica, pues ella reconoce que el piano es «su pilar».
Se nota sobremanera en las composiciones de ‘SUPERPOP’, que pueden sonar tan clasicistas como la pista inicial, ‘pienso en el final’; pero no solo cuando sus canciones presentan forma de balada la formación clásica de Belén Aguilera se hace evidente en el álbum: ‘VÉRTIGO’ devanea entre el drama-pop británico y el pop sinfónico, y no sabes si samplea a Mecano, a Mozart o a los dos, pero en cualquier caso es una composición estupenda dedicada a una noche de pasión.
Las influencias de Aguilera son tan contemporáneas que en ‘SUPERPOP’ suena tan pegada a un piano como a un vocoder: ‘cielo y tierra’ es otra de sus hermosas baladas melódicas, pero los tímidos vocoders que emergen en la grabación la aproximan al trabajo de gente como LAUV, Julia Michaels o Troye Sivan, y ‘FUCK OFF’ con Walls celebra la amistad mediante una producción de pop fresquita que trae a la mente a la última Alessia Cara o incluso a la Miley Cyrus de ‘We Can’t Stop’. ‘INTELIGENCIA EMOCIONAL’ es una de las pistas más vulnerables al hablar sobre salud mental desde un punto de vista personal, pero lo hace con ganas de divertir, entre sintes synth-pop y melodías corales a lo Little Mix, dando lugar a otro buen single oficial o potencial, de los cuales en este disco hay unos cuantos.
El gran hit de ‘SUPERPOP’ ha sido ‘LA TIRITA’, la concesión reggaetonera de rigor, pero favorecida por 1) la colaboración de Lola Indigo, cuya voz mejora todo lo que toca; y por 2) una producción con cierta miga, más cercana al trabajo de Alizzz que al de Anuel AA, es decir, más interesante que funcional. Mimi Doblas también ha sacado un disco inspirado en la música que escuchaba de adolescente, y ‘SUPERPOP’ apela a la nostalgia de manera muy divertida en la simpática ‘tirando de carrete’, en la que Aguilera se entretiene «mirando fotos de 2017» entre efectos de «carrete» incorporados.
Pablo Rouss, quien de hecho ha trabajado con Lola Indigo, se encuentra tras la producción de la mayoría de pistas de ‘SUPERPOP’, y con Aguilera arma un disco bastante dinámico a nivel de secuencia, en el que baladas como ‘cristal’ y pistas más animadas como ‘EN LAS NUBES’, llena de cambios de ritmo un tanto «regu», se van sucediendo una tras otra, sin saturar. Cuenta Aguilera que en ‘SUPERPOP’ ha querido «abrazar el pop y todas sus referencias» y se entrega de lleno a su propósito en un trabajo muy ameno de escuchar, en el que lo mismo te encuentras con un hit como ‘CAMALEÓN’, de sonido electropop, que con su opuesto ‘camuflo’, de nuevo centrado en el piano.