Sitúemonos. Vamos por el Acto II de una trilogía de Beyoncé, es decir, aún falta por conocer la tercera parte de una serie de discos iniciada en 2022 con ‘Renaissance’ y continuada este año con ‘Cowboy Carter’. El primero era house, el segundo, country. El tercero, nadie lo sabe.
Algo que une también a estos dos álbumes de Beyoncé es una inaudita falta de promoción. La artista conocida por sus espectaculares trabajos conceptuales audiovisuales (‘Beyoncé’, ‘Lemonade’) ha dejado de entregar siquiera vídeos al uso. En bares queer donde se pinchan videoclips, se ha tenido que optar a la desesperada por proyectar montajes cutres de ‘Break My Soul’ y ‘Texas Hold’Em’ porque nunca hubo vídeos oficiales. ¿Pasa la artista de gastarse el dinero en una plataforma en horas bajas como Youtube, o esconde un as en la manga y algún día habrá una película también para estos trabajos o al menos parte de ellos?
De momento, lo único que sabemos es que ‘Cowboy Carter’ es un disco abandonado, sin ni siquiera gira a la vista. De manera extraña, ’Texas Hold’Em’ ha sido el mayor éxito de Beyoncé en mucho tiempo, y continúa siendo su tema más oído varios meses después de su edición. Pero ni tal single ha llevado a la gente al disco, ni ella ha hecho promoción propiamente dicha del mismo para lograrlo. Ni una aparición televisiva, ni un descuento, ni un «bundle» con trampa, ni una firmita, ni edición extra. Nada.
En realidad, lo mismo sucedió con ‘Renaissance’. La diferencia es que su segundo single ‘CUFF IT’ funcionó por sí solo en TikTok, se viralizó sin que Beyoncé moviera un solo dedo y alargó la vida del álbum. Este año, la recepción del dúo con Miley Cyrus ‘II Most Wanted’ fue tibia porque la canción no era de lo mejor de ‘Cowboy Carter’. Entonces, habría cabido esperar que pasara algo con algunas de las gemas ocultas en el álbum, como ‘BODYGUARD’ o ‘YA YA’, o incluso con alguna de las colaboraciones, de Post Malone a Dolly Parton.
No ha pasado nada de eso. Como resultado, si ‘Renaissance’ pasó, por ejemplo, 72 semanas en el top 100 británico, el nuevo álbum ha resistido solo 14 semanas. En Estados Unidos resiste en el número 79 en su 19ª semana, estable. Pero los 1,4 millones despachados en todo el mundo según las estimaciones de Mediatraffic suponen que ‘Cowboy Carter’ va a ser el disco menos vendido de toda la carrera de Beyoncé. Una pena teniendo en cuenta todas las grandes ideas que hay -perdón, que había- en él.
Si nadie espera que Beyoncé retome la promo de este imprescindible disco-enciclopedia, la cantante sorprende -o no- involucrándose en la creación y promoción de un whisky. Se llama SirDavis, lo ha ideado en colaboración con Moët Hennessy y según Forbes, se ha inspirado en su bisabuelo, que era productor de licor ilegal. El mundo del pop tiembla ante la idea de que le pueda ir tan bien como a Rihanna en el mundo de la cosmética.