Tradicionalmente hemos sido un país europeísta. Se nos bombardeaba con aquello de que ser europeo era ser moderno (normal, porque la dictadura estaba a la vuelta de la esquina). De ser los que más apoyabamos en 2005 la constitución europea, en nuestra sociedad, ya que ser europeo no está de moda, está germinando la semilla del escepticismo, I mean, euroecepticismo.(edito: puro, No!!, puto teclado!!!)
Mi opinión es la de un soñador que no distingue fronteras: "somos ciudadanos de un mundo, que fue creado como casa de todos"