La Bañez, de Huelva, es bien conocida por estos lares por ser increíblemente sectaria y cuyos méritos profesionales consisten en ser lameculos mayor de la provincia y una de las personas probablemente peor dotadas con inteligencia del planeta. Su carrera se limita a pisotear a todoloquenosea afín al PP. Es una especie de inquisidora ideológica, gracias a lo que se granjeó el cariño de los sectores más retrogados y sectarios del PP... y ahí está... de menestra.