Tras más de 130 intensas horas, he terminado Zelda Breath of the Wild. Para ser más exactos, he derrotado al jefe final y salvado al reino de Hyrule, pero me quedan misiones secundarias, recuerdos, santuarios que descubrir y seguro que más de un secreto.
¿Es un juego de 10? Pues yo no le pondría esa nota tan rotunda, porque no creo que todo en el juego sea perfecto. Por ejemplo, la banda sonora no me parece especialmente memorable.
Pero al mismo tiempo pienso que si la Switch no tuviera más juegos, no me arrepentiría de habérmela comprado solamente por este.
Ahora se lo paso a un colega y a cambio él me dejará el de Mario, al que voy con expectativas no muy altas porque me parece imposible que hayan superado los Galaxy de la Wii.