:heartbreak:
Debe ser la segunda o tercera vez que la veo, pero me ha dejado tan hecho polvo como la primera. Es durísima y sórdida pero a la vez tiene una sensibilidad que en el resto de la filmografía de Gregg Araki ni está ni se la espera. Me sorprende cómo encajan aquí todos sus temas y obsesiones habituales (adolescentes, sexo gay, violencia, drogas, nihilismo, extraterrestres), incluso imágenes que se repiten de otras películas (como ese JGL con la cara pintada de sangre como James Duval en Maldita Generación), pero el resultado es completamente distinto al del resto de sus películas; menos pop, menos paródico, menos ir de radical, y mucho más emocional. Diría que alcanzó su madurez pero claro, después de esto se vino con Smiley Face, Kaboom o Now Apocalypse, así que ya tal.