Está simpática. Quiere ser un homenaje a la original y a todas esas pelis de aventuras ochenteras del sello Amblin, un poco al rebufo de Stranger Things. En ese sentido funciona, mejor que por ejemplo "Super 8", que se quedaba solo en las buenas intenciones. Aquí los personajes caen bien, hay algún niño un poco abofeteable pero no molesta. Es bastante entretenida, sonríes en algunos momentos (tampoco es que sea la monda) y básicamente es cine familiar a saco, lo suficientemente infantil para gustar a los hijos y cargadísima de guiños nostálgicos para enganchar a los padres.