Y ahora el comentario fuera de lugar.
Lo más inverosímil de todo Gladiator II pasa en la primera escena. Está Paul Mescal en un huerto minúsculo, que si tuvieran que comer de allí se moría de hambre, y tienen las calabazas ya para recoger, con su planta seca y la calabaza bien naranja, y al final del huerto se ven judías verdes con sus empas (no sé si la palabra es portuguesa, los palos por los que crecen y se sujetan las plantas) recién nacidas.
Contradicción máxima, la recogida de la calabaza es en octubre-noviembre, las judías se recogen en verano, si las siembra en octubre no te duran ni una noche con el frío.
Eso ya me sacó de la película del todo. :D