Mar Coll tiene una fantástica habilidad para diseccionar las relaciones familiares, y Nora Navas está increÃble (como casi siempre). La peli transpira naturalidad y está muy bien filmada, aunque el ritmo es un poco desigual. Eché en falta un poco más de mala hostia, si acaso, y me sobraron cuatro o cinco secuencias un tanto reiterativas. Pero vaya, que bien.