Viendo Her me acordé de esta historia porque la realidad es una cosa tan frágil que asusta. Nadie podrÃa decirme que lo que yo sentà por aquello que ni siquiera era real no fue real. Lo fue. Lo sentà en el estómago. El dolor era real, la felicidad era real. ¿Cual es pues el valor de la realidad? ¿Cual es la importancia que tiene si un derivado tiene la misma fuerza y el mismo poder que lo real? Yo he llorado y reÃdo con Her aún sabiendo que estaba ante una historia de amor que solo existÃa en un 50%. De la misma manera que lloré cuando desconectaron a HAL 9000 aún sabiendo que no tenÃa corazón ni sangre latiendo por sus cables. Cuando le rompen el corazón a WALL-E. Her me hizo daño porque todos hemos estado ahÃ. En esa escena, y en esa otra. En esa cama vacÃa en medio de la noche, esperando un teléfono que se ilumine, alguien al otro lado. Todos hemos estado ahÃ, diciéndole a otra persona que ya no más, o siendo dichos. Y arrepintiéndonos al dÃa siguiente.
