Lo de "Cincuenta sombras de Grey" allí está siendo un bombazo, de dedicarle un especial en Channel Four un viernes noche, de llenar los escaparates de las librerías de los tres libros y de que lo lean hasta mujeres cincuentonas que no sabían ni que era el sadomaso, como mi madre. Aunque también está siendo libro obligado para chonis veinteañeras. Para mí, aquí no ha llegado ni mucho menos a lo que se ha transformado allí, o es que al vivir en pueblo quedo un poco desconectado para eso, que es posible.
Yo ahora mismo estoy leyendo "Dos mujeres en Praga", que me está recordando a "Los renglones torcidos de Dios". Hala, ya puedo parecer un cateto.