Ah, muy bien, al final fui de naranja y no perdí, pero casi, el amarillo fue el color perdedor. Y a mí me tocó hacer los chupitos con los rojos porque eran el segundo color más abundante (el resto de naranjas se había ido para entonces), a las 2 y pico se fueron a un karaoke pero a mí ahí ya me asaltó el viejunismo que llevaba desde las 6 por ahí...