La simetrÃa me obsesiona de forma casi horrible. En mis estanterÃas, todo está relacionado con el número 3: 3 peluches por aquÃ, tres muñecos por allá, 3 fotos en otra parte, 3 adornos... Todos los libros los tengo ordenados por fecha de compra y/o tamaño; he llegado a quedarme sin leer la segunda parte (por decir algo) de alguna colección por el simple hecho de que el tamaño (altura) era diferente al del libro anterior.
Luego la manÃa que más odio es una que tengo desde hace mil años. Me paso el dÃa contando hasta 16; cuando estoy muy nervioso o aburrido (soy asà de extremista), todo lo que oigo lo veo leÃdo en mi cabeza, y cuento constantemente las letras. Si el total da 16 o 32, me quedo tranquilo; si da otro número, tengo que pensar en otra frase que sea de 16 o 32.
Me uno a lo de mirar el calzado de la gente; es lo primero en lo que me fijo de los demás. No puedo salir de casa sin lavarme el pelo (aunque sea para bajar a por el pan), ni tampoco sin ponerme desodorante. Siempre llevo reloj y dos anillos, y si no lo llevo todo puesto, no me quedo tranquilo (los llevo para ducharme y hasta para dormir).