El abrigo (de asos) lo devolví. Era enorme y me quedaba fatal. Me lleve el chubasquero y cuando llegamos a madrid llevaba eso y manga corta. BUENO, horrible. Es que era para ir directamente en manga corta. Entre la lluvia, la gente en atocha, el puto metro del demonio que lo oooodiooooo, la calefacción, el chaquetón… horrible. En el hotel igual con la puta calefacción y está mañana de verdad que me quería morir. Menos mal que no ha vuelto a llover. En Toledo está igual, aunque ahora por la noche ha refrescado pero con tanta cuesta ni se nota.