Un pelín caro, pero tampoco nada desorbitado, sí.
Nosotros comimos surtido de ibéricos y quesos, calamares a la andaluza (riquísimos), las gyozas estas, berenjenas fritas con miel y miso y ahora mismo no sé si algo más de picoteo. Luego de platos yo pedí un tartar de ternera tremendo; y los demás pulpo, tataki de atún y tacos de pez espada. De postre yo me comí medio flan de coco de mi madre.