efectivamente no le veo mucho las risas a la película. sólo antes de El Paseo, cuando todo es manso y te ves reflejado en algún pecadillo de padre-pareja como cuando él se come la manzana de la hija.
pero luego, cuando la tensión va invadiendo la historia, el hilillo de respiración contenida no da para reirse una mierda, la verdad