Ir a hacer la compra casi mensual, pillar el coche lleno de mierda, lavarlo, volver a casa, que el coche se te venga abajo en medio de la avenida más importante a una de las horas puntas de tráfico, pararte ennerviao a la derecha, poner las luces de emergencia, parar el motor y encenderlo, empezar a circular con los cojones de corbata, arrancar del tirón, meter primera, que te pille un semáforo y tener que parar, arrancar otra vez, circular con el coche que de 40 km/h no pasa y que se te viene abajo, luces de emergencia, miras por el retrovisor y sale humo al acelerar, coches que vienen como balas, que te adelanten y que se te quede parado delante de un aparcamiento.... SALVADO.
Mañana: grúa, taller, dinero... Y NO LEVANTO CABEZA.