Tampoco pasa nada si no se tiene una rutina. Estamos confinados en casa, no trabajando para nadie (eso los que estamos en paro o en un ERTE).
Está bien hacer cosas para distraernos, pero no caigamos en el error de imponernos horarios o rutina.
Disfruta, dentro de lo posible, de la situación.
No tiene nada de malo aburrirse, es más, creo que hasta viene bien de vez en cuando.