A mí me encanta tb Halloween y coincido en que es la tradición importada a la que más jugo se le puede sacar, aparte de que todos hemos crecido rodeados de referencias culturales y capítulos especiales de Halloween de nuestras series favoritas, por lo que, aunque nunca hayamos salido de niños en plan truco o trato, la tenemos más que asimilada desde la más tierna infancia. Yo no soy muy de disfrazarme, pero sí de decorar la casa con calabazas siniestras y telarañas falsas y organizar maratones de pelis petardas de terror.