Yo estoy contentísimo. El disco sigue creciendo después de casi un mes. No se me ha desinflado en absoluto. Y aunque no me parece que vaya a revolucionar el mundo de la música, sí es un disco clave, tanto en la carrera de Beyoncé, en el 2013, en el pop. . . El disco será recordado por lo que ha significado musicalmente, y también por su estrategia de marketing, por supuesto. Desde mi punto de vista, todo va unido, igual que los vídeos, o la portada. Incluso el documental de media hora con el que ha presentado el disco. Todo el conjunto es redondo.