De todas formas, hay margen para mucho, sin sacralizar nada. Muchas de mis amigas han decidido, por motivos profesionales, ser madres a partir de los 40, lo cual representa un riesgo grande, por la baja calidad del óvulo -y del esperma, en algunos casos. Es una decisión tan egoista como querer tener buenas tetas, ¿las convierte eso en malas madres?