Esto es lo que dice Virgine Despentes sobre las zorras del pop en Teoría King Kong:
"Ya sea mientras andamos por la ciudad o cuando vemos la MTV o un programa musical cualquiera (...) nos asalta la explosión del estilo super-puta, por otra parte muy favorecedor, que adoptan muchas chicas. Es una manera de disculparse, de tranquilizar a los hombres: "mira qué buena estoy, a pesar de mi autonomía, de mi cultura, de mi inteligencia, en realidad lo único que quiero es gustarte" parecen gritar las niñas en tanga.
(...) Las mujeres mandan a los hombres un mensaje tranquilizador: "no tengáis miedo de nosotras". Vale la pena llevar ropa poco confortable, zapatos que dificulten la marcha, vale la pena rehacerse la nariz o hincharse los senos, vale la pena morirse de hambre. Nunca antes una sociedad había exigido tantas pruebas de sumisión a las normas estéticas, tantas modificaciones corporales para feminizar un cuerpo. Al mismo tiempo, ninguna otra sociedad ha permitido de modo tan libre la circulación corporal e intelectual de las mujeres. La re-feminización de las mujeres parece una excusa que viene después de la pérdida de las prerrogativas masculinas, una manera de tranquilizarse, tranquilizándoles. 'Liberémonos, pero no demasiado. Queremos jugar al juego, no queremos poderes vinculados al falo, no queremos asustar a nadie' Las mujeres aminoran espontáneamente, disimulan lo que acaban de conseguir, se colocan en la posición de la seductora."
Pues eso, creo que es una reflexión interesante sobre si Madonna y cía son mujeres liberadas o no tanto.