Terminado el fin de semana y volviendo a la realidad del lunes, vengo a decir que Sauvage me gustó mucho. Muy bien interpretada, me parece una crónica muy realista de la vida en la calle, la prostitución y la droga.
Carmen y Lola también me gustó bastante, aunque se me hizo un poco larga. Aún así me gustó mucho el no querer edulcorar nada y mostrar cómo se ven las relaciones LGTB en el entorno de los gitanos. El coloquio posterior dio pie a que la directora explicase las dificultades con las que se encontró a la hora de rodar la película y las complicaciones de encontrar a dos chicas gitanas que estuviesen dispuestas a fumar o a besarse delante de una cámara. Y por supuesto, la película no representa al 100% de los gitanos, ni mucho menos.