El de ayer estuvo genial con los gays y porque por fin, físicamente, no había habido engaño por ninguna de las dos partes. Por lo demás, como siempre, historias realmente demenciales pero tremendamente entretenidas de ver (lo ajustado del formato le sienta de maravilla).
Lamentablemente no quedan muchos más capítulos de esta primera temporada, qué rabia.