Yo vivo muy tranquilito también. Es que si me tengo que comparar, en número de amigos, pierdo; en guapura, pierdo; en situación económica, pierdo; en cultura general, pierdo. Y así un buen etcétera.
No me importa lo más mínimo. Nunca he visto una relación como una competición. De hecho, me parece un poco raro verlo así, como decía.
Igual eres muy competitivo. O muy perfeccionista. No sé bien, la verdad.