Tren siempre, pero cuando no hay dinero blablacar es buena opción.
Una vez, el coche estaba lleno. Eramos 2 maricas, una chica y un tío super raro. No me acuerdo por qué pero estuvimos todo el viaje hablando de la iglesia y los gais, haciendo comentarios algo fuertes sobre los curas y el chico iba super callado, así que cambiamos de tema. Cuando llegamos al pueblo del chico, la conductora se ofreció a dejarlo en su casa y resulta que era seminarista. La cara de todos fue un cuadro.
En otro viaje a Praga, la pareja que llevaba el coche era super maja. Pero decidieron coger un atajo y estuvimos dando vueltas por pueblos checos muy randoms durante 3 horas, cuando parábamos a preguntar la gente sudaba de nosotros. Total, que se ofrecieron a llevarme al albergue, y les dije que no tenía nada reservado pero que me dejaran en la estación, al final acabé durmiendo esa noche de gratis en el sofá del apartamento que ellos habían alquilado.
Las demás experiencias, bien.