pues yo aún creo que en muy buena posición quedaron las polacas para ese esperpento de puesta en escena.
Estoy a favor de la ganadora previsible, la canción es pavisosa, me hubiese quedado antes con el Sabina holandés, o incluso en el mismo estilo de Conchi, a la nuestra que tenia chorretón de voz, pero esta vez antepongo un poco la "tocada de huevos" a Rusia a la calidad, total, hace años que a Eurovision no se la mide por ese patrón. Además, todo el tema siempre termina aportando jugosos debates, y salen todos los prejuicios a punta pala, hasta de la propia comunidad.