Cuando empecé en este despacho y era el cumpleaños de alguien se traía unos pastelitos para tomar café. Pero como yo soy más de salado, en mi primer cumpleaños traje unos sandwichitos para tomar y así cambiábamos un poco. Pues debí de abrir la veda para la competición porque el mes pasado la secretaria trajo pasteles, sandwiches del Viena, empanada de atún que había hecho ella, coca colas, sidra y tarta. Se están volviendo locas.