Dentro de mi particular operación vida sana, he cambiado mi desayuno.
Me he pasado a las tostadas de aceite de oliva virgen extra (AOVE) y tomate, por sus grandes beneficios y por sabor.
Lo que no encuentro por aquà es el tomate para untar con el pan. Por lo que, debido a que no tengo tiempo para prepararlo yo mismo, he decidido ir a lo fácil y comprarme latas de tomate triturado de primeras marcas. Ahora el pan tumaca me sabe a ketchup, pero sin serlo.
Imagen de la lata de tomate