Yo una vez fui testigo de un momento entre hilarante , de ternura, y de vergüenza ajena. Había una compañera pija wannabe que se pasó diciendo 2 días enteros: "Mi marido me ha comprado algo en Gucci para mi cumpleaños", "mi marido, Gucci, mi marido, Gucci, mi marido, Gucci, mi marido Gucci, mi marido, Gucci". Así 48 horas. Estaba ya la oficina entera expectante por saber si sería un bolsazo, un vestidazo o que. Pues el día de su cumpleaños viene muy silenciosa y cuando le preguntan dice: "Un llavero". Era una tira de tela con un aro de metal para las llaves. That's all. Obviamente todo el mundo cantó las alabanzas de los llaveros de Gucci, porque "que clase", "que practico" y so on.